Onintze Parra Ipiña. Investigadora predoctoral en Ingeniería Química. Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea. Ander Portillo Bazaco. Doctor en Ingeniería Química. Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea. Recientemente, investigadoras e investigadores del Departamento de Ingeniería Química de la Universidad del País Vasco hemos logrado obtener gasolina a partir de CO₂ e hidrógeno.
Investigadores de la Universidad de Jaén han obtenido hidrógeno para producir combustible a partir de residuos de la vendimia, lo que contribuirá a la economía circular en el sector vinícola.
Un equipo internacional de investigadores han desarrollado un proceso de reciclaje químico de plásticos que no requiere altas temperaturas y lo convierte en un combustible líquido sin generar subproductos.
La compañía naviera adquirirá 30.000 toneladas anuales de biometanol para sus 12 nuevos barcos propulsados por este combustible.
Los investigadores analizaron en un estudio la posibilidad de reciclar las mascarillas desechadas mediante descomposición térmica y convertirlas en combustible para producir energía.
[themoneytizer id=»17425-1″] Más de 88.000 toneladas de estos aceites usados se destinaron a regeneración para producir nuevos lubricantes, y otras 31.000 toneladas se procesaron como combustible.
[themoneytizer id=»17425-1″] La compañía, especializada en la valorización energética de residuos, inicia una nueva línea de negocio para obtener aceites pirolíticos a partir de distintos tipos de desechos.
[themoneytizer id=»17425-1″] La colaboración entre ambas compañías ha dado como resultado la obtención de un combustible diésel para vehículos a partir de plástico film procedente de residuos sólidos urbanos.
[themoneytizer id=»17425-1″] La firma cumple así con a la Orden Ministerial APM/206/2018, por la que se establecen los criterios para determinar cuándo el fuel recuperado procedente del tratamiento de residuos MARPOL tipo C para su uso como combustible en buques deja de ser residuo.
[themoneytizer id=»17425-1″] Catalogada por el jurado como revolucionaria, la tecnología desarrollada por la firma vasca es capaz de convertir un kilo de plástico en un litro de combustible.
