En un acto que tuvo lugar recientemente en Barcelona, se presentó la nueva organización internacional creada por la industria para dar respuesta a las obligaciones legales del sector en la UE, que establecen la recogida y clasificación obligatoria de residuos textiles para 2025.
Ambas organizaciones firman un convenio para facilitar a las empresas del sector de distribución de materiales de construcción, fontanería y climatización el cumplimiento de sus nuevas obligaciones de responsabilidad ampliada del productor y la colaboración mutua en los nuevos modelos de gestión de envases.
Asegre y Confecoi organizan el próximo 28 de septiembre un encuentro online para presentar la propuesta del SCRAP Implica para dar cobertura legal a las empresas en la gestión de envases industriales.
Es la primera vez que SIGAUS modifica esta aportación en sus casi 17 años de funcionamiento, y lo hace ahora, trasladando a todos los consumidores de aceites industriales la moderación de los costes de la gestión, fruto de la estabilidad del modelo operativo. El cambio será efectivo a partir del 1 de enero de 2024.
Una investigación de Material Focus revela que el número de vapeadores desechables se ha cuadruplicado en solo un año y ya son el flujo de residuos de más rápido crecimiento en el país.
Más de 650 empresas de diferentes sectores y tamaños ya se han unido al sistema colectivo de responsabilidad ampliada del productor, cuyo objetivo se centra en crear un sistema lo más eficiente posible desde el punto de vista económico, medioambiental y operativo.
El nuevo SCRAP ofrecerá a sus más de 200 empresas adheridas cobertura legal para el cumplimiento de sus obligaciones de responsabilidad ampliada del productor.
La confederación de fabricantes de productos de construcción y el SCRAP colaborarán para facilitar a las empresas del sector el cumplimiento de sus obligaciones en materia de responsabilidad ampliada del productor.
Si bien no existe un sistema de responsabilidad ampliada del productor propiamente dicho para los chicles, el Gobierno británico ha impulsado una iniciativa por la que los productores colaboran para sufragar los costes de su retirada y de concienciación social.
La organización europea de entidades de reutilización RREUSE aplaude la idea de que se obligue a los productores de textiles a apoyar financieramente las actividades de reutilización de la economía social.
