La conselleira de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Xunta de Galicia, Beatriz Mato, avanzó ayer que el departamento que dirige licitará en los próximos meses dos contratos para desarrollar actuaciones en materia de prevención y gestión de residuos industriales por valor de casi 1,8 millones.
Así lo puso de manifiesto en la clausura de una jornada sobre el Plan de gestión de residuos industriales 2016-2022, donde detalló que se licitarán contratos para la ejecución de medidas de prevención y formación, minimización de los residuos y apuesta por el ecodiseño en el sector productor y también acciones para mejorar la gestión de los residuos según su tipología (residuos de la construcción y demolición, sanitarios, aceites usados, aparatos eléctricos y electrónicos, buques y embarcaciones al final de su vida útil).
Una serie de actuaciones que se sumarán a las primeras ya puestas en marcha, con la eliminación de los neumáticos históricos, acopiados en Fene y As Somozas –de donde ya se retiraron– y A Laracha, donde se continúa con los trabajos, en los que se invirtió un importe de 2,4 millones de euros.
La conselleira de Medio Ambiente destacó dos de los objetivos que establece el Plan de residuos industriales de Galicia: reducir los efectos a nivel de cambio climático y tender al establecimiento de la economía circular. En ese sentido, recordó que la Xunta cuenta con tres estrategias para conseguir dichos objetivos, como es la Estrategia Gallega de Cambio Climático.
Una hoja de ruta en la que se fijan líneas de actuación que se deben poner en marcha a más largo plazo, horizonte 2050, para luchar frente al cambio climático. Indicó que llevará aparejada la elaboración de un mapa de conocimiento en cambio climático, que permitirá a Galicia contribuir, de forma coordinada, realista y eficiente, a combatir las causas que alimentan el cambio climático, por lo que animó a los agentes implicados a participar en su definición.
Este mismo año se iniciará la Estrategia Gallega de Sostenibilidad Ambiental y Economía Circular, que tendrá una vigencia de 8 años, hasta el 2025, y que se centrará en crear una economía eficiente, sostenible y baja en emisiones de carbono.
La tercera será la Estrategia Gallega de Economía Circular y –tal y como defendió la conselleira– hoy la única opción de futuro, al basarse en la premisa de convertir los residuos en recursos. Indicó que este modelo permitirá que la eficacia y la eficiencia se conviertan en la clave en el uso de los recursos, al añadir a las cuatro erres tradicionales otras tantas, como repensar, rediseñar, refabricar, redistribuir…
Defendió que este modelo tiene dos grandes ventajas, el potencial de resolver retos ambientales y proporcionar oportunidades de negocio y crecimiento económico y recordó que Galicia asumirá un papel importante al coordinar –junto con Cataluña y Valencia– un grupo de trabajo de economía circular y fondos europeos.
Destacó que Galicia no se puede quedar atrás y por eso ya se empiezan a dar los primeros pasos para implantar la economía circular.