El compuesto desarrollado por un grupo de investigadores se basa en quitosano, un polímero de origen natural abundante y ampliamente utilizado en la industria biomédica y alimentaria.
Aprovechan residuos de cangrejo para producir sensores de detección rápida de contaminantes
Las fabricas procesadoras de crustáceos generan un importante volumen de subproductos como el caparazón de cangrejo, que investigadores de la Universidad de Sevilla han reciclado para producir quitosano, al que posteriormente se le da fluorescencia para que pueda usarse en la detección de ciertas sustancias o en aplicaciones médicas.