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El pasado 15 de agosto entró en vigor la normativa que obliga a recuperar y reciclar estos consumibles ofimáticos, de los que solo en 2017 se comercializaron en España 16,9 millones de unidades.

Recyclia ya recoge los cartuchos de tinta y tóner usados

La plataforma Recyclia ya dispone de 544 puntos de recogida de cartuchos de tóner y tinta de impresoras en toda España y prevé llegar a los 42.000 en 2020, consolidando así la infraestructura necesaria para la correcta gestión de estos residuos. La entidad sin ánimo de lucro creó la iniciativa Tragatóner/Tragatinta antes de la entrada en vigor, el pasado 15 de agosto, de la obligación de reciclar estos consumibles.

Desde el pasado 1 de agosto, fecha en que Recyclia inició el diseño y desarrollo de la nueva plataforma y que ha comenzado a operar este mes de noviembre, ya forman parte de ella los 15 fabricantes de equipos de impresión más importantes de nuestro país y los tres principales mayoristas del mercado TIC en España.

Recyclia prevé recoger 1.230 toneladas de estos residuos (unos 7,7 millones de unidades de aquí a noviembre de 2019), lo que representaría un 65% de los consumibles puestos en el mercado por sus empresas adheridas, cumpliendo así el objetivo marcado por la nueva normativa sobre estos residuos para 2019.

Cabe recordar que la normativa considera aparatos electrónicos a los consumibles ofimáticos y responsabiliza, por tanto, a fabricantes e importadores de la organización y la financiación de su recogida y reciclaje. Asimismo, son los responsables de cumplir el objetivo de recogida establecido por la normativa: en 2018, el 55% de la media del peso de los cartuchos introducidos en el mercado español en los tres años anteriores, porcentaje que será del 65% en 2019 o el 85% de los residuos generados durante ese año. En 2017 se comercializaron en España 16,9 millones de consumibles ofimáticos, de los cuales 12,8 millones corresponden a cartuchos de tinta y 4,1 millones a tóner.

Sistema probado y basado en la I+D+i

Recyclia ha basado el diseño de su nuevo sistema en la experiencia adquirida durante los últimos 15 años en la gestión -a través de Ecofimática- de residuos ofimáticos del 90% de los fabricantes de este tipo de equipos, así como en un fuerte componente de I+D+i para garantizar el máximo aprovechamiento de materiales y su trazabilidad.

El sistema está fundamentado en cuatro pasos fundamentales. El primero de ellos es la recogida del residuo, basada en una metodología de gestión online y cercana al usuario. En este sentido, cabe señalar que el 75% de los 544 puntos de recogida desplegados hasta el momento se encuentra en el canal de distribución, y el 25% restante en empresas y organismos públicos y privados.

Los cartuchos se recogen y clasifican, y aquellos que no pueden ser reutilizados se someten a procesos de reciclaje

Todos ellos pueden solicitar la recogida a través de una plataforma electrónica. Por su parte, pymes y particulares dispondrán de un buscador web y de una aplicación móvil para consultar los contenedores más cercanos instalados en puntos limpios municipales y establecimientos comerciales.

Una vez recogidos y como segundo paso, los residuos son trasladados a una primera planta de clasificación, lo que permitirá devolver al fabricante aquellos cartuchos aptos para su reutilización, conforme a sus criterios de fabricación y sus políticas medioambientales particulares.

Posteriormente, los residuos que no sean susceptibles de ser reutilizados son trasladados a una planta de tratamiento en la que separan sus distintos componentes (ferrosos, no ferrosos, plásticos, tintas y polvos) para proceder, en el caso de los plásticos, a su triturado y permitir así su retorno al proceso de fabricación de nuevos productos.

Como cuarto y último paso, en el caso del polvo de tóner y tinta líquida, Recyclia ha puesto en marcha un área de I+D+i para encontrar opciones de reutilización de estas sustancias. Concretamente, y en el caso del polvo de tóner, la entidad está evaluando su uso como componente del alquitrán para asfaltado de carreteras, y en el caso de la tinta, su utilización como tinte para pinturas.

Economía circular

Gracias a este proceso, Tragatóner/Tragatinta garantizarán, prácticamente al 100%, la valorización de todos los materiales del residuo, lo que permitiría hablar de un primer caso de economía circular para el mercado de los consumibles de impresión.

Por último, cabe destacar que los fabricantes, importadores, distribuidores y organismos que forman parte de la red de puntos recogida pueden obtener online los certificados relativos al cumplimiento de la normativa, así como consultar la trazabilidad de sus residuos.

Según José Pérez, consejero delegado de Recyclia, “la nueva normativa, que ha equiparado los consumibles de impresión con el resto de los aparatos electrónicos, establece unos objetivos difíciles de alcanzar a los fabricantes individualmente a través de sus propios programas. No sólo disponemos de los únicos sistemas colectivos capaces de garantizar la correcta gestión de estos residuos y aprovechar la economía de escala que permiten, sino también los únicos capaces de propiciar el primer caso de economía circular del mercado de consumibles«.

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