Desarrollado por el CSIC, el proyecto abre nuevas vías hacia la producción de bioplásticos que contribuyen a establecer una economía circular de los plásticos.
Convertir el plástico convencional (el PET de las botellas o envases) en un nuevo tipo de bioplástico sostenible cuyos precursores (ceras bacterianas) los producen bacterias “domesticadas”. Ese es el objetivo del proyecto ReCrea, puesto en marcha por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) a iniciativa de la Fundación Reina Sofía y con la colaboración de la Fundación Primafrio.
De este modo, se abren nuevas vías hacia la producción de bioplásticos que contribuyen a establecer una economía circular a partir de residuos de plásticos convencionales. La duración de este proyecto, que comenzó en septiembre de 2021, será de tres años ampliable a cinco más. Para su desarrollo la Fundación Reina Sofía cubre el 50% de su coste.
En palabras de Juan Conesa, presidente de Fundación Primafrio, “colaborar en este proyecto innovador, enmarcado en la gestión sostenible de plásticos mediante la producción de bioplásticos y liderado por el CISIC, supone un importante avance en materia de sostenibilidad y economía circular”.
En el marco de esta colaboración, la reina Sofía ha visitado los laboratorios de Biotecnología de Polímeros en el que se desarrolla el proyecto ReCrea, dentro de la plataforma SUSPLAST.
SUSPLAST tiene como objetivo desarrollar actividades de investigación e innovación, incluyendo estrategias socioeducativas, enfocadas a procesos de producción de plásticos y su reciclaje, a través de estrategias mecánicas, químicas y biotecnológicas para cumplir con los requisitos necesarios para implementar una gestión de plásticos basada en una economía circular.