La planta de pirólisis desarrollada en el marco del proyecto europeo Life Dream ya está en funcionamiento en las instalaciones portuarias.
El Puerto pesquero de Almería se ha convertido en referente internacional de la economía circular azul gracias a la valorización de plásticos recogidos del fondo marino por los pescadores de arrastre como combustible para los barcos de pesca.
Recientemente se presentó en las instalaciones del puerto una planta de pirólisis que transforma estos residuos marinos en biodiésel reutilizable, en el marco del proyecto europeo Life Dream, en el que participan la Organización de Productores Pesqueros (OPP) de Almería, la Autoridad Portuaria de Almería (APA), el Instituto de Ciencias del Mar del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) junto a otras instituciones de España, Italia y Grecia, con el fin de mejorar el conocimiento para restaurar los ecosistemas de arrecifes profundos.
Este proceso pionero, que reduce la contaminación marina y nutre a los propios pescadores de un combustible alternativo, se basa en la pirólisis, una descomposición térmica de materiales plásticos en ausencia de oxígeno, que permite obtener un biodiésel utilizable y un subproducto en forma de cera o parafina. Este subproducto será aprovechado también por las mujeres de la Asociación Galatea, quienes elaborarán de forma artesanal velas decorativas marineras, añadiendo un componente social al proyecto.
Esta fase experimental del proyecto Life Dream, que en principio se prolongará durante un mes en el Puerto de Almería, generará tres puestos de trabajo para los que la OPP de Almería ha contratado a tres mujeres de la Asociación Galatea. Estas realizarán tareas clave durante el proceso como son recoger los residuos en los barcos, registrar los datos del caladero, pesar y clasificar los plásticos, alimentar la máquina de pirólisis y entregar el biodiésel resultante a los pescadores.
José María Gallart, gerente de la OPP de Almería, destacó la ejemplaridad del sector pesquero almeriense en la consecución de su objetivo cero residuos: “Estamos comprometidos con la conservación de nuestro entorno costero y de nuestro mar. En este proyecto participamos activamente para demostrar el papel esencial de los pescadores en la conservación marina. Este es un ejemplo claro de economía circular: transformamos un residuo pernicioso en un recurso útil, devolviendo a los pescadores biodiésel y reduciendo aún más la huella ecológica del pescado salvaje, que es la proteína animal más saludable y con menor huella de carbono. Las mujeres de Galatea también nos muestran su compromiso con el cuidado del mar, participando de forma activa y comprometida desde este puerto”.
Por su parte, la presidenta de la APA, Rosario Soto, resaltó que esta iniciativa, que cuenta con el Puerto de Almería como aliado, supone un nuevo hito en la lucha contra la contaminación marina y una muestra más del compromiso del sector pesquero almeriense con la innovación sostenible y la responsabilidad ambiental. “Nuestros pescadores llevan más de una década recogiendo basuras del fondo del mar, cuantificándolas y viendo su naturaleza; promoviendo la valorización de los residuos marinos para su transformación en otros objetos útiles para la sociedad”.
Claudio Lo Iacono, investigador del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC, señaló que el proyecto Dream está poniendo en evidencia el gran papel que se tiene que otorgar a los pescadores en la gestión sostenible de los recursos marinos a través de una concienciación ambiental: “Son ellos que se encargan de recoger el plástico que se encuentra en el fondo del mar, un tipo de material que ya no se puede reciclar de manera convencional porque ha sufrido muchas alteraciones bajo el agua. El modelo avanzado de Life Dream da otra vida a este plástico, produciendo un gasoil marino menos contaminante gracias a su baja emisión de dióxido de carbono, además reduciendo la inmisión en el mercado de nuevo combustible fósil”.