El proyecto ALGATEC II propone una solución biotecnológica y sostenible basada en las microalgas para tratar las grandes cantidades de aguas residuales que genera la industria productora de aceite de oliva.
La Universidad de Huelva acogió la semana pasada la Jornada “Microalgas al servicio del Medio Ambiente”, como parte de las actividades del Proyecto financiado por la Unión Europea ALGATEC II, cuyo objetivo es optimizar una solución de reciclaje biotecnológico para el agua de lavado generada en la producción del aceite de oliva, basada en la biotecnología de microalgas.
La jornada fue el escenario para el debate sobre el empleo de microalgas como alternativa para la depuración biológica de aguas residuales; en este caso, aplicada a un sector como el de la producción de aceite de oliva, que emplea cantidades importantes de este recurso natural en su proceso de elaboración.
La producción de aceite de oliva utiliza grandes volúmenes de agua potable (50 l/100 kg aceitunas) y genera cantidades significativas de aguas residuales, que contienen diferentes contaminantes de difícil tratamiento.
Como ejemplo, una almazara que produzca aproximadamente 500 toneladas anuales de aceite de oliva, puede generar en torno a 3.000 m3/año de aguas residuales contaminadas. La actual legislación europea establece la necesidad de una solución eficiente que reduzca el consumo de este recurso, mejore la calidad del agua tratada y recicle los residuos producidos.
El proyecto ALGATEC II viene a proponer una solución biotecnológica y sostenible para este problema basada en las microalgas, que permitiría reducir el volumen necesario de agua en las almazaras, el volumen de agua contaminada generada y por tanto los costes de gestión.
Ahorro de agua
Cinco pymes europeas trabajan juntas en este proyecto: Bioazul (Coordinadora del Proyecto), Biot (Tecnhical Manager) y DESAM, las tres españolas, junto a Enco (Italia) e Isitec (Alemania). Cofinanciado por la Comisión Europea, tiene la finalidad de demostrar el sistema ALGATEC II como una solución innovadora, respetuosa con el medio ambiente y de bajo costo para el tratamiento del agua de lavado de aceitunas, que permitiría obtener un agua potable de calidad y por tanto su reutilización en el proceso.
Esto constituiría una importante mejora en el proceso, fundamental en países como España, Italia y Grecia, principales productores de aceite de oliva en el mundo, y en los que tecnologías de ahorro de agua como esta podrían contribuir a mitigar problemas como la escasez de agua y las sequías en las zonas rurales.
El proyecto se inició el 1 de enero de 2013 y tiene una duración de 24 meses. Los ensayos se han llevado a cabo en una instalación experimental que ha operado durante la pasada campaña de recogida de aceitunas en una almazara de Puente Genil (Córdoba).
Fuente:
UHU