Las grandes marcas de refrescos suscriben una carta dirigida a Rishi Sunak para reiterar su apoyo a la introducción de un sistema de depósito, devolución y retorno (SDDR) que aumente las tasas de reciclaje y reduzca la huella de carbono del sector.
Los principales fabricantes de refrescos del Reino Unido -entre ellos Coca-Cola, PepsiCo y Suntory-, junto con la federación de minoristas independientes y organizaciones ecologistas como WWF, Surfers Against Sewage y la Marine Conservation Society, han firmado una carta impulsada por la organización ambiental Keep Britain Tidy y dirigida al primer ministro británico, Rishi Sunak, instándole a implantar un sistema de depósito, devolución y retorno (SDDR) de envases para proteger el medio ambiente y aumentar las tasas de reciclaje.
Las investigaciones de la ONG muestran que más del 70% de la basura en el país es consecuencia del consumo de bebidas, con unos 20 millones de envases de bebidas tirados a la basura, incinerados o acabando en el vertedero cada día, lo que supone más de 7.000 millones desperdiciados cada año.
Tras los recientes informes -«sin fundamento», según la carta- sobre los costes del SDDR y algunos llamamientos a abandonarlo, las entidades firmantes expresan colectivamente su apoyo al compromiso del Gobierno con el sistema de depósito y retorno de envases, reiterando que debería alinearse en todo el Reino Unido en términos de niveles de depósito, plazos, alcance y tarifas.
Pese al reciente anuncio de la relajación de algunas de sus «políticas verdes», el Gobierno de Sunak se ha comprometido a alcanzar el objetivo de cero emisiones netas en 2050, pero para ello será necesario que las tasas de reciclaje, estancadas, aumenten significativamente, lo que reduciría la huella de carbono del sector de envases.
Y según expresan las organizaciones firmantes de la misiva, la forma más eficaz de conseguirlo es mediante la introducción de un SDDR, que «proporcionará la infraestructura necesaria para aumentar significativamente las tasas de reciclaje, sin coste alguno para el contribuyente».
Muchos fabricantes y minoristas de bebidas han asumido compromisos similares y han firmado compromisos externos, todos ellos condicionados a la aplicación de un SDDR interoperable en todo el Reino Unido.
La directora ejecutiva de Keep Britain Tidy, Allison Ogden-Newton, ha declarado que «sólo un sistema de devolución de depósitos puede acabar con la suciedad que dejan los envases de bebidas y proporcionar el reciclado de alta calidad necesario para ayudar al Reino Unido a avanzar hacia una economía circular de los envases de bebidas. Por eso el SDDR es la política que cuenta con un apoyo casi universal, desde los fabricantes hasta los consumidores, pasando por todos los demás».
Se calcula que el sistema de depósito reducirá en un 85% el vertido de estos envases en la basura, retirándolos del medio ambiente y devolviéndolos a los productores para que elaboren nuevos productos.
Según una encuesta realizada por YouGov en nombre de Keep Britain Tidy, dos tercios de los ciudadanos apoyan la introducción de un SDDR, y el 36%, un depósito de hasta 20 peniques por envase (unos 23 céntmos).
La carta asegura que «más de 40 países ya han implantado con éxito un SDDR, y los mejor diseñados registran tasas de devolución de hasta el 98%».
Es necesario que los Entes Públicos implanten medidas obligatorias a los ciudadanos: Contenedores que no permitan, mediante sistemas de llamada de atención ciudadana, para no verter residuos impropios en el contenedor no correspondiente.