Circular Hub tiene el objetivo principal de acelerar la transición hacia la economía circular mediante el desarrollo de conocimiento y acciones concretas.

Circular Hub busca acelerar la transición hacia la economía circular
El equipo Circular Hub está formado por empresas, entidades sociales, investigadores y emprendedores

“Nuestra intención es demostrar que la economía circular genera un desarrollo social mayor que la economía lineal”, explica Aitor San Francisco, ingeniero emprendedor y uno de los agentes impulsores de Circular Hub. Esta iniciativa surgió a principios del año pasado a raíz del encuentro entre diferentes personas y proyectos que compartían el interés por impulsar la economía circular, unidos por el espacio Impact Hub Donostia.

Circular Hub está formado por un equipo multidisciplinar de agentes ligados al ámbito empresarial, social y de investigación, donde participan Emaús, Haiku-Futón, Motorlan Fagor Automation y Prosalus, así como los emprendedores Yeneko Lozano y Aitor San Francisco. El objetivo principal del grupo es acelerar la transición hacia la economía circular mediante el desarrollo de conocimiento y acciones concretas que sirvan para extender este modelo en el territorio.

La economía circular parte de la sustitución de los sistemas productivos lineales, que consisten en fabricar, usar y tirar, por un modelo donde los desechos se reintroducen de nuevo en el ciclo como materia prima, generando nuevas líneas de productos o servicios. Este modelo, que está tomando cada vez más fuerza en Europa, no solo supone un uso más eficiente de los recursos, también es una oportunidad para crear iniciativas empresariales que generen beneficios económicos, sociales y medioambientales.

Bajo este enfoque, Circular Hub se ha marcado tres líneas de actuación: la educación –sobre todo en el ámbito de la universidad–, la búsqueda de colaboraciones con agentes clave de Gipuzkoa y el desarrollo de microexperiencias tangibles. El equipo ya ha desarrollado la primera de ellas, el cultivo de hongos en posos de café, que se ha realizado reutilizando los restos procedentes de la cafetería del centro cultural donostiarra Tabakalera.

A lo largo de 2017, Circular Hub se ha propuesto desarrollar varias microexperiencias, como la instalación de máquinas de vending inverso para la recogida de envases y búsqueda de nuevos usos, o el diseño de un sistema para recuperar alimentos, evitando su desperdicio. “Nuestra idea no es tanto generar líneas de negocio como crear experiencias que muestren hacia dónde se puede avanzar y que puedan ser útiles tanto para la educación como para otros emprendedores”, explica Aitor San Francisco.

Circular Hub está colaborando como grupo de interés en el proyecto europeo Retrace, que cuenta con los socios Azaro Fundazioa y BEAZ a nivel estatal, y a través de la red Impact Hub, está apoyando el impulso de otros Circular Hubs en Madrid y Vigo. En 2016, el equipo obtuvo el apoyo de la Diputación Foral de Gipuzkoa en el marco de GipuzkoaLab como proyecto innovador para dar respuestas a los retos de futuro.

Fuente:
Spri

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