La sesión del Comité de Electrónica, Eléctricos y Baterías de Vehículos Eléctricos del Bureau of International Recycling (BIR) aborda los retos y oportunidades del sector en un contexto de transición energética y presión normativa creciente.
Durante la reciente Convención y Exposición Mundial del Reciclaje organizada por el BIR (Bureau of International Recycling), celebrada del 26 al 28 de mayo en Valencia, el Comité de Electrónica, Eléctricos y Baterías de Vehículos Eléctricos (EEEVB) reunió a expertos del sector para analizar los desafíos climáticos, el auge de la movilidad eléctrica, las tecnologías de reciclaje de baterías y las implicaciones del Convenio de Basilea en la gestión de residuos electrónicos.
La sesión, presidida por Josephita Harry, vicepresidenta de ventas de Pan American Zinc (EE.UU.), arrancó con una intervención inspiradora de Álvaro Rodríguez, coordinador en España de The Climate Reality Project. Rodríguez subrayó la urgencia de actuar ante el cambio climático y defendió un enfoque circular: “Tenemos a nuestro alcance todas las soluciones necesarias, todas relacionadas con los materiales, la energía, el reciclaje y el medio ambiente”. Señaló, además, que la movilidad representa un tercio de las emisiones globales de CO₂, y que cada vehículo eléctrico de hoy será una batería a reutilizar o reciclar mañana.
Desde el ámbito marítimo, Javier Cervera Alonso, responsable de transición energética en la naviera Baleària, presentó los nuevos ferris eléctricos de la compañía para rutas de corta distancia en España. Recalcó la relevancia del transporte marítimo, que representa el 3% de las emisiones globales, y explicó cómo el uso de embarcaciones eléctricas puede reducir este impacto, especialmente si se aprovechan las escalas en puerto para recargar baterías.
Germán Agulló, CEO de la española GDV Mobility, detalló el proceso técnico de reciclaje de baterías de litio, dividido en tres etapas: desmontaje inicial, separación de materiales (aluminio, cobre, masa negra) y purificación de dicha masa para recuperar metales críticos como cobalto, níquel y litio. Anunció además que su empresa contará con instalaciones operativas para el tratamiento de masa negra a partir de noviembre de 2025.
En el ámbito legal, Federica Guerra, especialista en cumplimiento ambiental y economía circular en Sider Rottami Adriatica (Italia), alertó sobre los desafíos derivados de la reciente inclusión del código Y49 en el Convenio de Basilea, que afecta a todos los residuos electrónicos. Señaló tres principales problemáticas: el riesgo de clasificación errónea, los elevados costes administrativos y la falta de armonización en la aplicación del convenio. “Este marco está generando serios obstáculos, especialmente para las pequeñas y medianas empresas del sector”, advirtió.
La sesión concluyó con un llamado de Josephita Harry a la colaboración entre actores del sector, destacando la importancia del trabajo conjunto para superar los retos regulatorios, tecnológicos y logísticos que plantea el futuro del reciclaje de aparatos eléctricos y electrónicos.