Los responsables del proyecto europeo Prospare han creado un nuevo método destinado a convertir restos no comercializables de la industria de la producción aviar en productos que van desde aditivos alimentarios hasta biodiésel.

valorización de subproductos animales
El proyecto busca reducir los residuos de la industria de producción aviar y generar nuevos productos. Foto: USDAgov en Flickr (cc)

El proyecto Prospare (Progress in saving proteins and recovering energy) se propuso desarrollar una plataforma tecnológica destinada al procesamiento multifunción de subproductos animales, en concreto de la industria aviar. Mediante un método biocatalítico innovador, es posible convertir restos no comercializables de la producción aviar en proteínas con valor añadido (péptidos hidrolizados) que pueden añadirse a productos comercializables.

Al mismo tiempo, se ha logrado ampliar el conocimiento científico que se posee sobre las técnicas de bioconversión, allanando así el camino para mejorar la explotación industrial de los residuos de origen animal.

El proyecto comenzó por estudiar formas de obtener mezclas de péptidos con valor añadido a partir de las materias primas. A continuación se puso el método a disposición de la industria de procesamiento a gran escala. Su objetivo consistió en lograr que estas mezclas de péptidos fuesen aprovechables por los sectores dedicados a la alimentación, los piensos y la bioquímica (aplicaciones cosméticas y microbiológicas).

La plataforma tecnológica se dedicó a hacer realidad varios beneficios clave. El primero es la explotación: aumentar el interés de varias industrias en los subproductos animales mediante el desarrollo de un nuevo proceso de conversión basado en un método biocatalítico. De este modo se crea un valor añadido representado en la conversión de estos residuos en péptidos hidrolizados útiles, por ejemplo, como aditivos para alimentos o piensos. La grasa y el sebo también pueden aprovecharse en la producción de energía renovable y de sustancias químicas orgánicas.

Otro objetivo del proyecto fue la funcionalidad. Los ingredientes nuevos han de satisfacer las expectativas del consumidor para hacerse un espacio en el mercado. Por tanto, se trabajó a fin de lograr las características sensoriales necesarias en los ingredientes nutricionales (sabor, aroma y digestibilidad) y así incrementar su potencial de comercialización.

Los socios del proyecto dieron prioridad a la seguridad, por lo que desarrollaron una serie de técnicas complementarias de bajo coste destinadas a la vigilancia de la contaminación microbiana y nuevas herramientas de seguimiento útiles en la detección de micotoxinas. Estas técnicas y herramientas garantizan que los aditivos se ajustan a la normativa vigente.

Un grupo interdisciplinar

El proyecto Prospare supone un verdadero adelanto en el aprovechamiento de subproductos animales hasta ahora no comercializables mediante biocatalizadores (enzimas y composiciones enzimáticas) y métodos de bioconversión eficientes.

Resulta innovador además en cuanto a su condición interdisciplinaria, pues cuenta con especialistas en biotecnología, química, biofísica, inmunología y toxicología y con la experiencia de varios socios industriales que pusieron a prueba las tecnologías propuestas.

Las primeras plantas de producción a escala piloto (en Rusia y Bélgica) lograron alcanzar el estándar necesario de productividad y sostenibilidad plenas.

Se espera que este progreso tecnológico transforme el tratamiento de los subproductos animales y contribuya a reducir los residuos. El aprovechamiento de este tipo de productos bajo condiciones de seguridad garantizada ha supuesto desde antaño un auténtico reto. No obstante, las tecnologías de procesamiento creadas en Prospare cumplirán con todos los requisitos de seguridad europeos y lograrán ser económicamente sostenibles.

Fuente:
Cordis

Deje una respuesta

Queremos saber si no eres un bot *