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El proyecto BIRHAKOM busca reducir el vertido de residuos de los procesos de fundición, transformándolos en fertilizante o relleno para instalaciones de geotermia.

Compostaje de arenas de fundición

La fabricación de piezas metálicas mediante el proceso de fundición consiste en verter el metal fundido en un molde de arena con la forma de la pieza a obtener. En este molde se solidifica el metal al enfriarse, adquiriendo así la forma de la pieza.

La destrucción de un molde genera una gran cantidad de arena, y los procesos de recuperación son capaces de reciclar hasta un 85-90% de estas arenas de fundición usadas. Pero esta arena puede utilizarse para la fabricación de nuevos moldes un número limitado de veces. Cuando ha alcanzado el final de su ciclo de vida, se convierte en un residuo que es depositado en los vertederos.

Para abordar esta cuestión y reducir el vertido de estos residuos, el proyecto BIRHAKOM, puesto en marcha por la empresa alavesa Amurrio Ferrocarril en colaboración con el centro tecnológico Tecnalia, plantea un innovador proceso de compostaje de las arenas de fundición junto con restos de poda vegetal y estiércol de caseríos cercanos. De esta forma, los residuos se transforman en fertilizante agrícola o en material de relleno de alto valor añadido para la instalación de sistemas de geotermia.

Biorregeneración

El proceso de compostaje combina la mezcla de follaje verde con madera, arenas y excremento animal. Debido a la abundancia de nutrientes utilizados por los microbios como fuente de energía, la degradación de la materia orgánica es relativamente rápida al comienzo del proceso de compostaje. En esta primera fase la energía térmica producida por los microbios activos hace que la temperatura del montón aumente. A medida que se consumen los nutrientes, la actividad microbiana disminuye y se produce un descenso de la temperatura.

Posteriormente los microorganismos degradan la celulosa y la lignina. El pH se estabiliza y la demanda de oxígeno se reduce.

La etapa final del proceso de compostaje es el curado, envejecimiento o maduración. Se trata de una etapa larga, entre cuatro y nueve meses, en la cual desciende la actividad microbiana y desaparecen los agentes patógenos para el ser humano, quedando un material muy rico en nutrientes para las plantas, al tiempo que inerte y seguro para su utilización en agricultura.

Iniciativa pionera en Euskadi

Amurrio Ferrocarril y Equipos es la primera empresa de Euskadi que va a reciclar arenas de fundición por el sistema de compostaje, impulsando la sostenibilidad de la fundición de metales. Se prevé además que este proyecto genere una reducción en los costes de logística y eliminación de residuos y la creación de al menos tres puestos de trabajo entre los años 2021 y 2023.

A partir de este método de biorregeneración de arenas de fundición se podrá reducir la presencia de materiales contaminados en los vertederos, y utilizar este nuevo material bioestabilizado o compost para el acondicionamiento del suelo y material de relleno, así como en aplicaciones de geoingeniería.

Este proyecto potencia así la economía circular, siguiendo un modelo en el que los residuos pasan a ser recursos a final de la vida útil del producto.

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