Mediante un proceso de reciclaje mecánico y destintado, un proyecto interempresarial ha convertido un envase alimentario de polietileno con propiedades barrera en un nuevo envase para lavavajillas con un 30% de contenido reciclado.
Una colaboración entre las empresas Dow, HP Indigo, Reifenhäuser, Cadel Deinking y Karlville ha permitido desarrollar un proceso de reciclaje mecánico de bolsas pouche de polietileno (PE), consiguiendo cerrar el círculo de estos envases, cada vez más utilizados en diversas aplicaciones, incluida la alimentación.
El proceso consta de varias etapas. Partiendo de una bolsa alimentaria de polietileno (PE) con propiedades barrera y diseñada para ser reciclada, el equipo del proyecto ha utilizado el reciclado mecánico y el destintado para crear un envase MDO-PE de alta calidad para lavavajillas con un 30% de contenido reciclado y apta para el reciclaje.
En el siguiente paso, el equipo está trabajando en un prototipo de pasaporte digital del producto que permita registrar las propiedades del envase y hacer que la bolsa sea identificable para el reciclaje de alta calidad dentro de la gestión de residuos postconsumo.
«Hemos modificado y mejorado nuestras líneas de producción para que los films y envases no sólo sean económicos y funcionales, sino que también satisfagan la gran demanda de envases reciclables basados en estructuras monomateriales», comentó Ralf Wiechmann, responsable de innovación de films de Reifenhäuser.
«Este proyecto demuestra que podemos producir con éxito tanto envases reciclables, según las directrices de Recyclass y CEFLEX, como utilizar materiales reciclados en aplicaciones de alto valor si colaboramos eficazmente a lo largo de la cadena de valor», añade.
Según Pablo Cartagena, director de desarrollo de negocio de Cadel Deinking, «el proceso de destintado es clave porque elimina eficazmente la tinta de la superficie del plástico para obtener un plástico con características similares al material virgen en bruto, lo que ayuda a proporcionar un reciclaje de bolsa a bolsa de alta calidad».
Cerrar el círculo de la trazabilidad
Como una evolución más del proyecto, las empresas están trabajando para añadir la trazabilidad digital a las bolsas, en línea con la iniciativa R-Cycle para desarrollar un estándar de trazabilidad abierto y aplicable a nivel mundial para los envases de plástico.
El objetivo es registrar automáticamente las propiedades de reciclabilidad de los envases durante su producción, proporcionando un pasaporte digital del producto, y transmitirlas a través de la cadena de valor. Gracias a unas marcas especiales, los envases pueden identificarse en el proceso de reciclaje y clasificarse en fracciones de un solo tipo. Esto sería clave para obtener reciclados de alta calidad.