La instalación producirá 3.400.000 metros cúbicos anuales de biogás y 5.600 toneladas de compost a partir de residuos orgánicos y lodos de depuradora.
El pasado mes de diciembre se puso en marcha la planta de biometanización del Consorcio para la Gestión de Residuos en Asturias (COGERSA) en Serín. Gracias a esta nueva infraestructura, COGERSA aumenta su capacidad de reciclaje, ya que la planta permitirá gestionar 30.000 toneladas anuales de biorresiduos seleccionados en origen, cifra que podría duplicarse y llegar hasta las 60.000 toneladas en una segunda fase de ampliación.
La planta, que ocupa una superficie de 38.610 metros cuadrados, está dotada de tecnología alemana de tratamiento por vía húmeda, que permite gestionar tanto materia orgánica procedente de recogida selectiva de residuos urbanos como lodos de aguas residuales, generando compost de alta calidad, gracias al sistema de compostaje final en trincheras, y biogás, que será canalizado en las instalaciones de COGERSA para su transformación en energía.
Todos los procesos se realizan en naves o tanques cerrados, equipados de un sistema de renovación de aire. Así tras alimentar a la nave de maduración se destina a un sistema de lavado y a un biofiltro previamente a su emisión. Todas las aguas excedentes de proceso son trasladadas a la planta de tratamiento de lixiviados existente en el vertedero de Serín.
En total, la nueva planta de biometanización, que dará empleo a diez personas cuando esté a pleno rendimiento, producirá 3.400.000 metros cúbicos anuales de biogás y 5.600 toneladas de compost.
Dentro del Plan Estratégico de Residuos del Principado de Asturias, se ha aprobado una subvención de dos millones de euros anuales a los ayuntamientos para incentivar la recogida de materia orgánica.