Estos tributos superaron en España los 16.600 millones de euros en 2011, de los que casi el 82% correspondieron a impuestos sobre la energía.

En el marco del Reglamento de la Unión Europea sobre cuentas medioambientales, el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado la Cuenta de impuestos ambientales, que recoge la serie contable 2008-2011. Estos tributos se componen de impuestos sobre la energía, el transporte y la contaminación y los recursos.

Los impuestos ambientales ascendieron en España a 16.676,9 millones de euros en 2011, lo que supuso una reducción del 4,6% respecto al año anterior. En el periodo comprendido entre 2008 y 2011, el descenso ha sido del 8,2%.

Los hogares pagaron como consumidores finales el 59,8% del total de impuestos ambientales en el año 2011. Por detrás se situaron los servicios, concentrando el transporte y almacenamiento un 18,3% del total y el resto un 9,9%.

En total, los hogares pagaron 9.965,3 millones de euros en impuestos ambientales en 2011, un 1,4% más que en el año anterior. El transporte y almacenamiento aumentó un 1,2% el pago de estos tributos, mientras que el resto de servicios lo redujo un 26,1%.

Los impuestos sobre la energía alcanzaron los 13.638,0 millones de euros en 2011, lo que supuso el 81,8% del total. Por su parte, los impuestos sobre el transporte ascendieron a 2.803,8 millones de euros (el 16,8% del total), mientras que los impuestos sobre la contaminación y los recursos representaron el 1,4% restante.

En cuanto a su evolución durante el último año de referencia, los impuestos sobre la energía se redujeron un 4,3% en 2011 respecto a 2010, mientras que los del transporte descendieron un 6,7% y los impuestos sobre la contaminación y los recursos aumentaron un 7,8%.

En el periodo 2008-2011 los impuestos sobre la energía han descendido un 5,6% y los impuestos sobre el transporte han bajado un 19,7%. Por su parte, los impuestos sobre la contaminación y los recursos se incrementaron un 2,6%.

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