La Fundación Ellen MacArthur ha anunciado un cambio estratégico para pasar de situar la economía circular en las agendas de los líderes a impulsar su implantación a escala mundial centrándose en tres ámbitos específicos.

Cambios en la Fundación Ellen MacArthur para imnplementar la economía circular
Jonquil Hackenberg, directora general de la Fundación Ellen MacArthur

Durante los últimos 15 años, la Fundación Ellen MacArthur ha situado la economía circular en la agenda mundial y ha demostrado su viabilidad en todos los sectores, destacándola como una solución vital tanto para los retos económicos como para los medioambientales. Según la propia organización, más del 55% de las empresas tienen ahora ambiciones y objetivos de economía circular, y existen hasta 75 hojas de ruta nacionales de economía circular.

Así, la fundación se ha propuesto abrir un nuevo capítulo: establecer la agenda para la aplicación de la economía circular y centrar la acción empresarial y política en la superación de las barreras sistémicas para el camino de la transformación del mercado (por ejemplo, la falta de infraestructuras).

Para ello, la organización se centrará en tres objetivos específicos: plásticos y envases, minerales críticos y comercio minorista. El objetivo es responder a macrotendencias disruptivas en las que la acción en materia de economía circular puede marcar la diferencia en los problemas urgentes a los que se enfrentan los líderes empresariales y los responsables políticos.

Para impulsar la acción a escala empresarial y política, la fundación invertirá en competencias y experiencia fundamentales, como conocimientos técnicos y políticos, experiencia global y liderazgo de alto nivel.

Por otro lado, al centrar el foco en estas tres misiones, la entidad reconoce que dedicará menos recursos a la promoción y educación en torno a la economía circular, y que trabajará con menos sectores. Esto implicará cambios en la propia organización, que ha reconocido en un comunicado que «lamentablemente, hay puestos en riesgo de despido».

Según ha explicado la directora general de la Fundación Ellen MacArthur, Jonquil Hackenberg, «la fundación ha creado una red inigualable al más alto nivel de empresas y gobiernos de todo el mundo. Ahora las principales empresas nos piden que pasemos al siguiente nivel y les ayudemos a abordar las barreras sistémicas que bloquean el progreso actual. Todo el mundo reconoce que las reglas del juego tienen que evolucionar para hacer frente a la magnitud del reto, pero nosotros estamos en una posición única para establecer la agenda de soluciones circulares a escala, y luego activarla al ritmo adecuado».

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