Durante el pasado año, se recogió una media de 105,6 gramos por habitante de estos residuos a través de los Puntos SIGRE.
En 2024, el reciclaje de medicamentos aumentó en España un 4,3% respecto al año anterior. Un dato que forma parte del informe anual de actividad presentado recientemente por SIGRE a las autoridades ambientales y que recoge de manera pormenorizada los resultados alcanzados en la gestión de los residuos de medicamentos y sus envases.
En concreto, este informe señala que, durante el pasado año, se recogió una media de 105,6 gramos de estos residuos por habitante a través de los Puntos SIGRE que se encuentran a disposición de los ciudadanos en las más de 22.150 farmacias de todo el país.
«Depositar en el Punto SIGRE los medicamentos caducados, en mal estado o que ya no se necesitan, junto con sus envases, es una forma sencilla y eficaz de cuidar del planeta y de nuestra propia salud», ha señalado Miguel Vega, director general de SIGRE.
Un gesto que ya se practica en tres de cada cuatro hogares españoles y que tiene un impacto positivo: elimina el riesgo que supone para la salud el consumo de medicamentos sobrantes o caducados y evita la contaminación de nuestros ríos y suelos, como ocurriría si los tiráramos a la basura o por el desagüe, a la vez que permite reciclar los materiales de los envases recogidos.
En cuanto a los envases de los medicamentos, para minimizar su impacto ambiental, las compañías farmacéuticas han implementado desde el año 2000 más de 3.500 iniciativas de ecodiseño sobre sus envases. Gracias a este esfuerzo continuo, y a pesar de las limitaciones legales existentes, cada año se ponen en el mercado español cerca de 500 millones de fármacos (uno de cada tres) con alguna mejora medioambiental en su envase, lo que ha permitido reducir su peso medio en más de un 25 % y ha facilitado que a día de hoy se recicle el 67,4 % de los materiales de los envases recogidos (papel, cartón, vidrio, plásticos y metales).