Ubicado en el centro educativo Axular Lizeoa, el acceso peatonal se completará con bancos y papeleras realizados con los tapones reciclados de las propias botellas.

Un tramo de acera a partir de botellas de plástico recicladas
Foto: Axular Lizeoa

El Departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa inauguró la semana pasada un tramo de acera realizado a partir de botellas de plástico recicladas. Ubicado en el centro educativo Axular Lizeoa, en Donostia, las obras del nuevo acceso peatonal se llevaron a cabo durante los meses de julio y agosto de este año de la mano de la propia Diputación y el Grupo Campezo, en colaboración con las empresas Eko-REC y Ekomodo.

Para la construcción del pavimento se han empleado un total de 50.000 botellas de plástico. Además, se usarán los tapones de dichas botellas para construir bancos y papeleras que se colocarán en el acceso peatonal. Estas papeleras recicladas servirán a su vez para poder recoger y reciclar más residuos.

El diputado de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa, José Ignacio Asensio, puso en valor la importancia de este proyecto: “Una vez más, en Gipuzkoa nos posicionamos en la vanguardia del sector del reciclaje inaugurando este primer tramo de acera sostenible. Esta es la senda para descarbonizar nuestra economía, a través del reciclaje, el fomento del empleo local y el desacoplamiento de la actividad económica de la utilización de los recursos naturales”.

El pavimento desarrollado por el Grupo Campezo, consiste, básicamente, en una mezcla bituminosa en caliente (MBC). Se compone de materiales reciclados, como lo son las botellas de plástico (PET), valorizadas por la empresa guipuzcoana EkoREC.

Asimismo, como complemento a la acera construida, se colocarán bancos y papeleras suministradas por Ekomodo, elaborados ambos a partir de los tapones de las botellas de plástico recicladas. En los próximos meses, Axular Lizeoa llevará a cabo una recogida de botellas y tapones de botellas entre el alumnado y toda la comunidad educativa para devolver a los suministradores de la materia prima reciclada las 50.000 botellas que se han utilizado en la construcción de esta acera sostenible.

Asensio subrayó la importancia de esta iniciativa, ya que “de esta manera se hace partícipe a la comunidad educativa, tanto a docentes como al alumnado, consiguiendo concienciar y sensibilizar desde el punto de vista de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y los criterios de la economía circular”.

 

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