La segunda jornada del Foro de Gestión de Residuos Municipales puso también el foco en los sistemas eficientes de recogida de residuos en Italia, como el puerta a puerta, los contenedores inteligentes y el pago por generación.
La 7ª edición del Waste in Progress, el Foro de Gestión de Residuos Municipales, celebró ayer su segunda jornada y lo hizo poniendo el foco en el dimensionamiento de los servicios de recogida de residuos de alta eficiencia con identificación y cuáles son los aspectos a tener en cuenta, como es el caso de la maquinaria, la tecnología y los costes de mantenimiento.
El profesor de derecho administrativo de la Universidad de A Coruña, Juan José Pernas, fue el encargado de inaugurar la segunda jornada del congreso y lo ha hecho con una ponencia en la que recalcó que la contratación pública tiene que ser “eficiente” y que ésta se debe entender “como una inversión y no como un gasto”. Avisó de que la ineficiencia ambiental, entendida como un bajo nivel de reciclaje o el exceso de vertidos, generan inevitablemente una ineficiencia económica que se traduce en malas ofertas, una ejecución del servicio deficiente o un bajo nivel de competencia. Consideró que “contratar siempre debe tener una necesidad justificada y hay que anteponer la calidad al precio”.
También intervino Pilar Chiva, directora del área circular de la Agencia de Residuos de Catalunya, quien cree que se ha “fallado” en la transmisión de información hacia el ciudadano y que es clave “explicar” los motivos que llevan a las personas y también a los municipios a pagar unas determinadas tasas de residuos. Y Xavier Balagué, gerente de Ecoembes en Catalunya, Comunidad Valenciana y Baleares, presentó el nuevo convenio sobre la recogida selectiva de envases que, entre otras novedades, incluirá el Sistema Digital de Gestión de Residuos (SDGR). Se trata de una plataforma que dará información y permitirá mejorar la gestión por parte de los municipios para que sea más eficaz llevar a cabo los procesos de recogida, selección y reciclaje de envases.
‘Fianza’ de 25 céntimos para latas y botellas de plástico en Austria
El innovador Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) que ha puesto en marcha este año Austria fue el hilo conductor de la ponencia de Andreas Pertl, director general de la Oficina de Coordinación del Packaging de este país. Desde el pasado 1 de enero se ha implantado un tipo de ‘fianza’ en las botellas de plástico y latas de aluminio con el objetivo de fomentar el reciclaje y cumplir con las directrices de la Unión Europea. Todos los envases que están incluidos en este sistema tienen un coste adicional de 25 céntimos, cantidad que se le retorna al comprador si éste deposita el envaso en unos puntos de recogida determinados. En los supermercados hay instaladas unas máquinas que así lo permiten, mientras que en los pequeños comercios la gestión se puede hacer manualmente. El sistema tiene en cuenta todas las botellas y latas de entre 0,1 y 3 litros (excepto la leche y productos lácteos) siempre y cuando estén identificadas con el logotipo del nuevo SDDR austríaco. Como condición, los envases deben devolverse vacíos, con la etiqueta intacta y sin estar chafados.
Se pretende así reciclar unos 2.200 millones de botellas de plástico y envases metálicos y alcanzar una tasa de reciclaje del 90% en 2027, dos años antes de lo que marca la Unión Europea. “Las quejas de las empresa y ciudadanos al principio son normales y están justificadas, independientemente de si se cambia la recogida selectiva o se implementa un sistema como éste. Pero por lo que hemos visto, la sociedad se está adaptando rápidamente y a finales de año haremos una evaluación de cómo ha funcionado para mejorarlo en 2026”, explicó.
Datos abiertos, puerta a puerta y cálculo tarifario en Italia
Italia fue el país protagonista en la segunda jornada del Waste in Progress, con hasta tres ponencias que sirvieron para hacer una radiografía del funcionamiento de este país en materia de gestión de residuos y de los costes y servicios relacionados con este ámbito. El consultor Michele Giavini expuso el método pionero en Europa que lleva a cabo su país: la publicación obligatoria y el posterior tratamiento de datos oficiales sobre recogida selectiva a nivel municipal y también de los servicios y costes derivados. Desde 2010 que se pueden consultar todos estos datos, lo que permite analizar cuál es el contexto de este sector en cualquier momento y qué medidas se pueden tomar para avanzar hacia una economía circular y sostenible.
Italia es un país con 60 millones de habitantes y unos 8.000 municipios, 5.000 de los cuales utilizan el modelo de recogida puerta a puerta y solo 162 tienen contenedores cerrados. “Todavía hay un largo camino por recorrer, pero poder consultar todos estos datos nos ha permitido sacar muchas conclusiones que después hemos utilizado para mejorar e implantar sistemas que faciliten una mejor recogida de residuos”, expresó. Entre uno de los muchos datos que dio a conocer, explicó que “el puerta a puerta no resulta un modelo tan caro como puede parecer si lo comparamos con modelos más nuevos como los contenedores cerrados. Esto es así porque gracias a los datos se ha podido optimizar este sistema. Su frecuencia, los costes o también los vehículos que se utilizan para la recogida han sido mejorados”.
ARERA (Autorità di Regolazione per Energia Reti e Ambiente), de la que también se habló el martes en la primera jornada del Foro, salió de nuevo a escena y durante la charla de Walter Giacetti, consultor del Instituto per la Finanza e l’Economia Locale. Expuso el sistema a partir del cual esta autoridad independiente regula y estandariza el cálculo de los servicios de recogida de residuos en todo el país. Para llevarlo a cabo, desde 2020 se creó un plan económico-financiero pionero en Europa que se ha convertido en la base para decidir qué es lo que paga cada ciudadano por la recogida de residuos.
“Es un sistema bastante complejo. Lo demuestra, por ejemplo, que solamente uno de sus muchos métodos tarifarios contiene 40 fórmulas matemáticas y algoritmos”, ilustró. El resultado de esta implementación ha despertado cierta “polémica” porque, aunque muchos municipios y gestores públicos y privados lo han recibido positivamente porque, entre otras cosas, ha permitido crear tarifas que incluyen los costes, en otras poblaciones no se ha visto con buenos ojos la “complejidad” de los cálculos que se han tenido que llevar a cabo. ARERA ha creado un tope máximo de precios que impide aumentar un tanto por ciento determinado para evitar el enriquecimiento de los gestores, como pasa en otros países. Y gana importancia el pago por generación, una tarifa que engloba hasta 8 millones de habitantes y que significa una tasa de recogida de un 81%.
La realidad expuesta en ambas ponencias complementa la charla que corrió a cargo de Giulio Renato, director general de gestión de residuos y flota del Grupo Hera, compañía multiservicio con más de 10.000 trabajadores y la primera empresa en volumen de tratamiento de residuos de Italia. Presente en diferentes regiones del país, su radio de actuación principal es la zona de Emilia-Romaña. Gestiona un millón y medio de toneladas de residuos cada año y tiene cobertura en 636 municipios, lo que significa unos 2,5 millones de habitantes. Renato habló de una “evolución positiva” desde que se decidió cambiar el servicio y apostar por el puerta a puerta, los contenedores inteligentes y el pago por generación. Admitió que “hemos alcanzado unos niveles de recogida selectiva altísimos” y que “se trabaja con la voluntad de cerrar el 2025 con una tasa del 80% en este ámbito”. También dio importancia al coste que esto supone por cada habitante y también el coste que implica no tirar la basura donde no toca. “Con los medios que tenemos, los servicios que ofrecemos y otras mejoras como el pago por generación, hemos llegado a una calidad de separación y reciclaje muy altos. Pero Italia todavía tiene que mejorar esta calidad en el reciclaje. Para conseguirlo, tenemos que convencer a la gente de cómo debe actuar correctamente y hacerles entender que las personas y sus acciones son las que marcan la diferencia”, ha concluido.
Espacio para empresas
Un día más, los Talks & Debate fueron un espacio a partir del cual todas las empresas especializadas del sector y los responsables de las administraciones presentaron casos reales, intercambiaron ideas y plantearon retos concretos. Representantes de compañías como Ros Roca, Novamont, TOMRA y Nord Engineering, entre otras, enumeraron los aspectos a tener en cuenta en la compra y el mantenimiento de la maquinaria y otras soluciones al servicio. Por la tarde, fue turno también para debatir sobre los riesgos y los usos de la tecnología a cargo de otras empresas como ID·Waste, Ecocomputer, Baron o MOBA.
El Foro pondrá hoy el punto final a la 7ª edición con una jornada dedicada al dimensionamiento y los recursos por el pago del servicio, las herramientas de comunicación bidireccional con la ciudadanía y la estandardización y el cálculo de indicadores. Será el turno para conocer el seguimiento del servicio de recogida de alta eficiencia de la mancomunidad extremeña de Tentudía; para que Percy Forster comparta la estrategia del nudging, una herramienta implantada en Irlanda para mejorar los resultados de recogida selectiva, y para presentar el sistema de cálculo, los resultados y la mejora continua en un modelo consolidado como es el de Londres, entre otros temas.